Esta mañana al despertarme he tenido un pensamiento muy certero: No me gusta su forma de ser, no me hace feliz...
Yo no pretendo cambiarle, tampoco tengo paciencia para soportar su modo de ser.
A veces me hace feliz, pero parece que son las menos.
Y si este es su modo de actuar no me gusta.
Hoy me ha defraudado de un modo infinito y creo que ya no puede haber vuelta atrás.
Es más fácil distanciarse de alguien estando a su lado.
Quiero ser madura, paciente, astuta, fría...Quiero dejar de sentir, de necesitarle.
Quiero alejarme de él, sé que no me hará feliz.
No sé que hago aqui.
Yo quiero acostarme con una sonrisa en los labios, quiero sentir la dulzura de saber que alguien especial te tiene en sus pensamientos y él no me hace sentir asi.
La aventura ha de terminar, esto es lo que hay.
jueves, 22 de marzo de 2007
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